Rocío Girat había conmocionado a la ciudad y al país cuando relató los reiterados abusos de su padre, un ex oficial de la Armada. Este lunes sufrió un mal momento a partir de un cuestionado accionar policial en el subte porteño.
Rocío Girat sufrió durante cuatro años los abusos de su padre, el ex suboficial de la Armada Marcelo Girat, quien fue condenado a 14 años de prisión. Rocío, que conmocionó a Mar del Plata y al país al relatar su durísima historia, contó en su momento que la Armada encubrió en su momento a su abusador.
Este lunes, a Rocío le tocó vivir un momento desagradable y difícil de explicar.
Según informó el diario Página 12, Girat fue víctima de una injustificada detención de la policía de la ciudad de Buenos Aires, cuando se encontraba con su pareja en la estación Constitución de la línea C del subte.
En realidad la peor parte se la llevó su pareja, Mariana Solange Gomez, quien fue golpeada y detenida en el ingreso de la estación Constitución del subte por estar besándose con su esposa, con la excusa de que estaba fumando en un sector no autorizado.
La trasladaron a la oficina de la Policía de la Ciudad ubicada en la estación Boedo de la línea E y pasadas las 21 dispusieron su liberación.
La Policía porteña golpeó y arrestó violentamente a Mariana Solange Gómez, de 24 años, en el ingreso de la estación Constitución de la línea C de subte. Fue por besar a su esposa, Rocio Girat, protagonista de una emblemática denuncia por los abusos de su padre.
Los agentes comenzaron con intimidaciones contra las jóvenes, trataron de “pibe” a Gómez y luego la golpearon y la detuvieron con la excusa de que se encontraba fumando un cigarrillo en un lugar no autorizado.
“Mariana se encontraba junto con su esposa en la estación de Constitución en Capital Federal besándose cuando fue interceptada por personal policial de la Policía de la Ciudad que bajo la excusa de que se encontraba fumando un cigarrillo (de tabaco e industrial) en un sector no autorizado la golpeo y la detuvo, en un claro ataque por su orientación sexual”, denunció la Agrupación LGBTI 1969.
Gómez fue trasladada a la comisaría de la policía porteña ubicada en la estación Boedo de la línea E del subte, acusada de “resistencia a la autoridad y desacato”.
Distintos colectivos feministas y por la diversidad convocaron a manifestarse a ese lugar y pasadas las 21 lograron que se ordene la liberación de la joven.